* A través del programa “Ayudar es una fiesta” los pequeños Lucía y Juan Pablo donaron sus cumpleaños en beneficio de pequeños con discapacidad auditiva y visual
HERMOSILLO.- Los pequeños Lucía Puigferrat Aguilar y Juan Pablo Insúa Pohls son ya a sus escasos años un verdadero ejemplo a seguir para miles de hermosillenses.
Estos dos niños han aprendido que lo verdaderamente valioso de la vida está en el dar sin esperar nada a cambio en lugar de recibir, y gracias al programa consentido del Sistema DIF Hermosillo, “Ayudar es una fiesta” hoy lo pudieron demostrar.
Ambos niños se apuntaron de inmediato al programa que tiene como único objetivo el ser intermediario entre la sociedad con ganas de ayudar a sus semejantes y las asociaciones que brindan apoyo desinteresado a quienes más lo necesitan.
Lucía y Juan Pablo donaron sus fiestas, sus juguetes y todos los presentes que pudieron haber recibido por parte de sus padres, amigos y familiares para una muy noble causa.
Ellos decidieron por iniciativa propia, brindar apoyo a personas que necesitan del buen corazón de los hermosillenses.
Gracias a lo que pudieron reunir en sus festejos se pudo apoyar a una asociación que atiende a personas con discapacidad visual y a dos personas que necesitan un aparato auditivo electrónico.
La pequeña Lucía decidió que su donativo se dividiera en dos partes, la primera para apoyar a la niña María Fernanda González Martínez, quien a través de la Asociación “Tú que oyes escúchame”, solicitó un molde de aparato auditivo.
La segunda parte fue destinada para la compra del aparato auditivo que servirá para que el señor Jesús Refugio Félix Salazar logre oír con claridad de nueva cuenta.
Por su parte, Juan Pablo logró que su donativo se convirtiera en artículos de imperante necesidad para los pequeños que son atendidos diariamente en el Instituto Iris.
El donante logró comprar material didáctico especializado para estas personas como un balón de basquetbol con sonaja, calculadoras parlantes, lupas tamaño carta para que puedan estudiar, un ensamble asociación y un cubribraile.
Los pequeños cumpleañeros no pudieron ocultar la enorme sonrisa que brilló en su rostro al ver que su esfuerzo y su desinteresada acción representó mucho para estos niños y adultos con problemas auditivos y visuales.
Adriana Uriarte Trujillo, directora del Sistema DIF Hermosillo, invitó a más ciudadanos de todas las edades a seguir apoyando, a sentir la satisfacción de ayudar a quienes más lo necesitan a través del más noble programa que tiene esta dependencia municipal.
Para información los interesados pueden acudir a las oficinas del Sistema DIF Hermosillo, ubicadas en Gustavo Hodgers, entre Yáñez y Garmendia, en la colonia Modelo.
HERMOSILLO.- Los pequeños Lucía Puigferrat Aguilar y Juan Pablo Insúa Pohls son ya a sus escasos años un verdadero ejemplo a seguir para miles de hermosillenses.
Estos dos niños han aprendido que lo verdaderamente valioso de la vida está en el dar sin esperar nada a cambio en lugar de recibir, y gracias al programa consentido del Sistema DIF Hermosillo, “Ayudar es una fiesta” hoy lo pudieron demostrar.
Ambos niños se apuntaron de inmediato al programa que tiene como único objetivo el ser intermediario entre la sociedad con ganas de ayudar a sus semejantes y las asociaciones que brindan apoyo desinteresado a quienes más lo necesitan.
Lucía y Juan Pablo donaron sus fiestas, sus juguetes y todos los presentes que pudieron haber recibido por parte de sus padres, amigos y familiares para una muy noble causa.
Ellos decidieron por iniciativa propia, brindar apoyo a personas que necesitan del buen corazón de los hermosillenses.
Gracias a lo que pudieron reunir en sus festejos se pudo apoyar a una asociación que atiende a personas con discapacidad visual y a dos personas que necesitan un aparato auditivo electrónico.
La pequeña Lucía decidió que su donativo se dividiera en dos partes, la primera para apoyar a la niña María Fernanda González Martínez, quien a través de la Asociación “Tú que oyes escúchame”, solicitó un molde de aparato auditivo.
La segunda parte fue destinada para la compra del aparato auditivo que servirá para que el señor Jesús Refugio Félix Salazar logre oír con claridad de nueva cuenta.
Por su parte, Juan Pablo logró que su donativo se convirtiera en artículos de imperante necesidad para los pequeños que son atendidos diariamente en el Instituto Iris.
El donante logró comprar material didáctico especializado para estas personas como un balón de basquetbol con sonaja, calculadoras parlantes, lupas tamaño carta para que puedan estudiar, un ensamble asociación y un cubribraile.
Los pequeños cumpleañeros no pudieron ocultar la enorme sonrisa que brilló en su rostro al ver que su esfuerzo y su desinteresada acción representó mucho para estos niños y adultos con problemas auditivos y visuales.
Adriana Uriarte Trujillo, directora del Sistema DIF Hermosillo, invitó a más ciudadanos de todas las edades a seguir apoyando, a sentir la satisfacción de ayudar a quienes más lo necesitan a través del más noble programa que tiene esta dependencia municipal.
Para información los interesados pueden acudir a las oficinas del Sistema DIF Hermosillo, ubicadas en Gustavo Hodgers, entre Yáñez y Garmendia, en la colonia Modelo.