Alfonso CAMPOS-RUBIO
HERMOSILLO.- Mario Becerril López, de 47 años, empleado de Wal Mart, así como Ariel Humberto Arvayo Acuña (42), fueron detenidos por los agentes municipales por la venta y compra de dos tarimas de madera, a razón de 50 pesos cada una, en perjuicio de la empresa mencionada, informó el comandante Marcos Castro.
El jefe de la zona sur en la corporación hermosillense agregó que como a las 13:35 horas del pasado lunes los elementos a su mando fueron requeridos por Luis Eduardo Chávez López, de 36 años, subgerente de Wal Mart, ubicado en Paseo Río Sonora y Periférico Poniente, para referir que momentos antes había sorprendido a Arvayo Acuña, con dos tarimas de madera en la caja del Dodge “Neon”, rojo, serie IPES22C5VD106785, sin placas, con engomado de FEA número 2828, dentro del área de carga y descarga.
Inmediatamente después lo cuestionó sobre la procedencia de las maderas, contestándole que Mario Becerril López, empleado de la tienda se las había vendido en 50 pesos cada una, además de que él mismo se las había acomodado en la cajuela, cuyo dinero lo portaba en uno de los bolsillos del pantalón, procediéndose en consecuencia para internarlos en una celda a disposición del Segundo AMPFC para el deslinde de responsabilidades, añadió Marcos Castro.
HERMOSILLO.- Mario Becerril López, de 47 años, empleado de Wal Mart, así como Ariel Humberto Arvayo Acuña (42), fueron detenidos por los agentes municipales por la venta y compra de dos tarimas de madera, a razón de 50 pesos cada una, en perjuicio de la empresa mencionada, informó el comandante Marcos Castro.
El jefe de la zona sur en la corporación hermosillense agregó que como a las 13:35 horas del pasado lunes los elementos a su mando fueron requeridos por Luis Eduardo Chávez López, de 36 años, subgerente de Wal Mart, ubicado en Paseo Río Sonora y Periférico Poniente, para referir que momentos antes había sorprendido a Arvayo Acuña, con dos tarimas de madera en la caja del Dodge “Neon”, rojo, serie IPES22C5VD106785, sin placas, con engomado de FEA número 2828, dentro del área de carga y descarga.
Inmediatamente después lo cuestionó sobre la procedencia de las maderas, contestándole que Mario Becerril López, empleado de la tienda se las había vendido en 50 pesos cada una, además de que él mismo se las había acomodado en la cajuela, cuyo dinero lo portaba en uno de los bolsillos del pantalón, procediéndose en consecuencia para internarlos en una celda a disposición del Segundo AMPFC para el deslinde de responsabilidades, añadió Marcos Castro.
