Alfonso CAMPOS-RUBIO
HERMOSILLO.- Los soldados comisionados en el Punto de Revisión Carretero ubicado en el kilómetro 110 de la Cuatro Carriles, casi con el entronque con el camino vecinal a Querobabi, lograron el decomiso fortuito de un cargamento de 11.4 kilos de cocaína que desde el Distrito Federal a Ensenada eran trasladados en un tracto camión, se informó.
Lo anterior se suscitó durante la madrugada del pasado viernes, cuando alrededor de las 03:30 horas para su revisión arribó el tractocamión Kenworth, 2007, placas 448-EK-1, de la empresa “Transportes Castores”, manejado por Juan Sánchez Bravo, acompañado por Mauricio Sánchez Bravo y Adela García Gutiérrez (hermano y esposa del conductor, respectivamente), así como dos menores de edad, oriundos de la ciudad de Puebla.
En esos momentos al revisar la carga, compuesta por productos químicos tóxicos, como solventes, empacada en tambores de doscientos litros y cubetas de veinte, encontrándose en cuatro de ellas once paquetes con los once kilos, 400 gramos del alcaloide, turnándoseles a los adultos ante el Ministerio Público Federal donde se les radicó la averiguación previa AP/PGR/SON/HER-V/775/2009, mientras que los infantes serían canalizados a la autoridad correspondiente, en este caso la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia, se añadió.
HERMOSILLO.- Los soldados comisionados en el Punto de Revisión Carretero ubicado en el kilómetro 110 de la Cuatro Carriles, casi con el entronque con el camino vecinal a Querobabi, lograron el decomiso fortuito de un cargamento de 11.4 kilos de cocaína que desde el Distrito Federal a Ensenada eran trasladados en un tracto camión, se informó.
Lo anterior se suscitó durante la madrugada del pasado viernes, cuando alrededor de las 03:30 horas para su revisión arribó el tractocamión Kenworth, 2007, placas 448-EK-1, de la empresa “Transportes Castores”, manejado por Juan Sánchez Bravo, acompañado por Mauricio Sánchez Bravo y Adela García Gutiérrez (hermano y esposa del conductor, respectivamente), así como dos menores de edad, oriundos de la ciudad de Puebla.
En esos momentos al revisar la carga, compuesta por productos químicos tóxicos, como solventes, empacada en tambores de doscientos litros y cubetas de veinte, encontrándose en cuatro de ellas once paquetes con los once kilos, 400 gramos del alcaloide, turnándoseles a los adultos ante el Ministerio Público Federal donde se les radicó la averiguación previa AP/PGR/SON/HER-V/775/2009, mientras que los infantes serían canalizados a la autoridad correspondiente, en este caso la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia, se añadió.
