viernes, 21 de agosto de 2009

Asalta Comando Armado una Vivienda de Populosa Colonia


Alfonso CAMPOS-RUBIO

HERMOSILLO.- Con pavorosas pistolas de grueso calibre, aprovechándose de la ineficiente vigilancia policíaca, un “comando” de cuatro sujeto perpetraron la madrugada del jueves el asalto a una vivienda de la populosa colonia Alvaro Obregón, donde tras amagar a sus moradores los peligrosos hampones se apoderaron de joyería fina y dos automóviles, todo ello con valor superior a los 400 mil pesos, cuyo latrocinio pretendió ser ocultado por la corporación hermosillense.
Lo anterior se suscitó alrededor de las 01:50 horas en el inmueble ubicado por las calles República de El Salvador y Jesús Siqueiros, donde los maleantes tras amagar al matrimonio conformado por Estela Peralta Salazar y Jorge Lagarda Cabrera, de 61 y 63 años, y atarlos de pies y manos, procedieron a apoderarse de las joyas y otros objetos.
Asimismo, se logró saber que los maleantes se llevaron, aparte de las joya de oro y piedras preciosas, las tarjetas bancarias del afectado, así como el Ford “Expedition”, 1997, arena, placas VWM-42-41 y el GMC “pick-up”, 1999, gris, placas UW-22-134.
Posteriormente, se presentaron dos agentes municipales a bordo de la patrulla 709, quiénes únicamente se limitaron a tomar datos del violento hurto, así como de observar los restos de cinta adhesiva de papel con que maniataron y pialaron al anciano matrimonio, para luego dejarlos encerrados en recámaras diferentes.
Asimismo, el señor Lagarda Cabrera, propietario de un taller autoeléctrico, relató a los uniformados que disfrutaba de la lluvia por fuera de su domicilio cuando los hampones llegaron y preguntaron por su hijo Enrique, asegurándole que requerían de su servicio ya que tenían problemas con la batería de un carro.
Detalló que el comportamiento de los jóvenes se le hizo sospechoso, por lo que al intentar ingresar a su propiedad fue amenazado con una pistola y sometido mediante el uso de la fuerza.
Manifestó que a empujones fue trasladado hasta una de las recámaras, donde fue atado de pies y manos con la cinta adhesiva y le cubrieron la cabeza con una chamarra.
Indicó que de igual forma, su esposa fue inmovilizada en otro cuarto y varias veces le dijeron que los iban a matar si no entrega 50 mil pesos en efectivo, dinero que le exigían para liberar a su hijo Enrique, joven que supuestamente estaba privado de la libertad en otra parte de la ciudad, lo cual resultó falso.
Dijo que ante el temor de ser asesinados por los hampones, les ofreció cuatro mil pesos que tenía en la cartera y las tarjetas de crédito con todo y dígitos de seguridad para que retiraran dinero de un cajero automático.
Expresó que durante el tiempo que permanecieron en su inmueble, los asaltantes desconectaron la línea telefónica y cortaron el suministro eléctrico.
Sin que hasta el momento se lograra la detención de los peligrosos hampones, por la causa señalada.