martes, 15 de septiembre de 2009

Cauda de Asaltos a Mano Armada en Capital Sonorense

Alfonso CAMPOS-RUBIO

HERMOSILLO.- De nueva cuenta los peligrosos hampones volvieron a realizar impunemente otras de las suyas, ahora en perjuicio de una gasolinera, una empresa de seguridad y una droguería, sin que en ninguno de los casos se lograra detención alguna, se informó en la Policía Preventiva y Tránsito Municipal.
Primeramente, como a las 10:15 horas del pasado lunes en la gasolinería Servi Gas, de las calles Progreso, entre Francisco Monteverde y De la Reforma, colonia Heberto Castillo, se presentó un desconocido, armado con una pavorosa escuadra de grueso calibre, quien tras amagarlo lo despojó de 60 mil pesos, para luego escapar a bordo de un “pick-up”, blanco, con placas VXH-72-71, según reportó el encargado Bernardo Castillo.
Posteriormente al indagar en el Repuve, se informó que las placas VXH-72-71, pertenecen al Nissan “Tsuru”, 2006, serie 3N1EB31S96K334579, el cual según la Secretaría de Hacienda del Estado de Sonora se encuentra registrado a nombre de la empresa Eveready de México, S. A. de C. V.
REVIENTAN OFICINAS DE EMPRESA DE SEGURIDAD
Por otro lado, a las 12:42 horas del pasado domingo en las calles Guadalupe Victoria y Gastón S. Madrid, colonia San Benito, donde se encuentra la empresa de seguridad “Escorpión”, el señor Cesar Manuel Díaz Figueroa, de 37 años, encargado del establecimiento, reportó que al llegar momentos antes se percató que la puerta principal estaba dañada, dándose cuenta que los autores se apoderaron de un bloque de notas y dos cajas con papel.
ENESIMO ASALTO A FARMACIAS KINO
Asimismo, a las 16:50 horas del mismo día, en la Farmacia Kino, propiedad de Roberto Ruibal Astiazarán, ubicada en las calles Francisco Monteverde y Andrés Quintana Roo, colonia San Benito, se reiteró el asalto a mano armada en su perjuicio, perpetrado por un desconocido que con pavorosa escuadra de grueso calibre en sus manos amagó al encargado Felizardo Moreno Piña, de 48 años, para enseguida despojarlo de 600 pesos, retirándose luego a toda carrera rumbo al oriente y enseguida dio vuelta por la calle Ignacio Romero al norte, perdiéndosele de vista.