* Llevan 350 Pesos de Mil, 800 que Había en la Caja Chica
Alfonso CAMPOS-RUBIO
HERMOSILLO.- Un botín de 350 pesos fue lo que logró llevarse un desconocido tras violentar la azotea de una tienda de conveniencia, hasta llegar a una “jaulita” donde guardan la caja chica, en la cual tenían mil, 800 pesos del fondo, en hechos ocurridos durante la madrugada del miércoles en la tienda de abarrotes ubicada Guillermo Arreola y José María Mendoza, colonia Olivares.
En dicho local, la señora Kerem Berenice Escárcega, de 21 años, relató que alrededor de las 10:30 horas se percató de un agujero en el techo de la bodega, sobre el cuarto de baño, y al revisar la “jaulita” donde guardan el fondo para el día siguiente se percató del robo, además de que el candado de la misma estaba bien colocado, sin violencia alguna, así como de un costal de ixtle colocado sobre la cámara de seguridad.
Por lo que al revisar los oficiales municipales, se percataron que efectivamente en el techo de lámina estaba un agujero de 40 por cuarenta centímetros, sin que al agujerear la azotea se activara el sistema de alarmas, el cual tienen contratado con la empresa Master Guard, se añadió.
Alfonso CAMPOS-RUBIO
HERMOSILLO.- Un botín de 350 pesos fue lo que logró llevarse un desconocido tras violentar la azotea de una tienda de conveniencia, hasta llegar a una “jaulita” donde guardan la caja chica, en la cual tenían mil, 800 pesos del fondo, en hechos ocurridos durante la madrugada del miércoles en la tienda de abarrotes ubicada Guillermo Arreola y José María Mendoza, colonia Olivares.
En dicho local, la señora Kerem Berenice Escárcega, de 21 años, relató que alrededor de las 10:30 horas se percató de un agujero en el techo de la bodega, sobre el cuarto de baño, y al revisar la “jaulita” donde guardan el fondo para el día siguiente se percató del robo, además de que el candado de la misma estaba bien colocado, sin violencia alguna, así como de un costal de ixtle colocado sobre la cámara de seguridad.
Por lo que al revisar los oficiales municipales, se percataron que efectivamente en el techo de lámina estaba un agujero de 40 por cuarenta centímetros, sin que al agujerear la azotea se activara el sistema de alarmas, el cual tienen contratado con la empresa Master Guard, se añadió.