ABEL MURRIETA GUTIERREZ Martín Vallejo González
HERMOSILLO.- La ratificación de Abel Murrieta Gutiérrez como titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) cayó como balde de agua fría a los padres de los niños fallecidos en la guardería ABC, quienes ya pegaron de gritos.
Con sonora manifestación, los padres de las víctimas del 5 de junio expresaron su inconformidad y coraje por la decisión del gobernador Guillermo Padres Elías de mantener a Murrieta Gutiérrez al frente de la PGJE, quien tuvo desaseada participación en las indagatorias del caso que le arrebató la federación por inepto.
En rueda de prensa, Padres Elías casi ponía a Murrieta Gutiérrez como el salvador de Sonora ante la andanada del crimen organizado y pedía a los sonorenses un fuerte aplauso para el cajemense, pues según el gobernante ha trabajado muy requetebién y merece quedarse cuando menos hasta enero, situación que no sólo encolerizó a los padres de las víctimas del incendio.
Solo faltó que Padres Elías pidiera a los sonorenses estar agradecidos con Murrieta Gutiérrez por haber aceptado seguir sacrificándose por nosotros, lo que de plano hubiera sido el colmo.
De acuerdo a lo dicho por el propio gobernador, Murrieta Gutiérrez ya le planteó algunas ideas que se pueden aplicar en Sonora para mejorar la seguridad pública, lo que al parecer no le interesó hacer en la pasada administración.
Quien no para de saltar de alegría por la ratificación de Murrieta Gutiérrez es José Larrinaga Talamantes, quien seguirá becado como enlace de Comunicación Social de la PGJE y haciendo hasta lo imposible por obstaculizar el trabajo de los reporteros.
Incluso, “El Pepe” ya soltó el borrego de que se van a quedar otros seis años ya que Padres Elías no tienen con quien relevar a Murrieta Gutiérrez.
A como están las cosas, no deberá sorprender que en cualquier momento el actual gobierno de la sorpresa al reactivar en el área de seguridad pública a personajes de nebuloso pasado.
Por rumbos de la Policía Municipal las cosas tampoco están como para echar las campanas al vuelo ya que el estrenado alcalde dio el primer tropezón al nombrar por recomendación política a los nuevos jefes policiacos que lo acompañaran durante el arranque de su administración.
Lo que de plano tiene molestos a los municipales es la supuesta designación de Jesús Amarilla Méndez como Supervisor General de la corporación, ya que como Subjefe no dio el ancho y difícilmente lo dará en el cargo para el cual el mismo se nombró, pues teme quedarse fuera de la nómina.
El teniente coronel Carlos Huerta Robles, designado como nuevo jefe de la Policía Municipal por obra y gracia del poderoso senador Manlio Fabio Beltrones Rivera, deberá cuidarse de Amarillas Méndez ya que en la primera oportunidad que tenga le va a morder la mano.
Por lo pronto, Amarillas Méndez ya se apropió de la oficina del comandante José Luis Rocha, jefe del Departamento de Tránsito, quien como húngaro anda en busca de un espacio para poder realizar su trabajo.
HERMOSILLO.- La ratificación de Abel Murrieta Gutiérrez como titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) cayó como balde de agua fría a los padres de los niños fallecidos en la guardería ABC, quienes ya pegaron de gritos.
Con sonora manifestación, los padres de las víctimas del 5 de junio expresaron su inconformidad y coraje por la decisión del gobernador Guillermo Padres Elías de mantener a Murrieta Gutiérrez al frente de la PGJE, quien tuvo desaseada participación en las indagatorias del caso que le arrebató la federación por inepto.En rueda de prensa, Padres Elías casi ponía a Murrieta Gutiérrez como el salvador de Sonora ante la andanada del crimen organizado y pedía a los sonorenses un fuerte aplauso para el cajemense, pues según el gobernante ha trabajado muy requetebién y merece quedarse cuando menos hasta enero, situación que no sólo encolerizó a los padres de las víctimas del incendio.
Solo faltó que Padres Elías pidiera a los sonorenses estar agradecidos con Murrieta Gutiérrez por haber aceptado seguir sacrificándose por nosotros, lo que de plano hubiera sido el colmo.
De acuerdo a lo dicho por el propio gobernador, Murrieta Gutiérrez ya le planteó algunas ideas que se pueden aplicar en Sonora para mejorar la seguridad pública, lo que al parecer no le interesó hacer en la pasada administración.
Quien no para de saltar de alegría por la ratificación de Murrieta Gutiérrez es José Larrinaga Talamantes, quien seguirá becado como enlace de Comunicación Social de la PGJE y haciendo hasta lo imposible por obstaculizar el trabajo de los reporteros.
Incluso, “El Pepe” ya soltó el borrego de que se van a quedar otros seis años ya que Padres Elías no tienen con quien relevar a Murrieta Gutiérrez.
A como están las cosas, no deberá sorprender que en cualquier momento el actual gobierno de la sorpresa al reactivar en el área de seguridad pública a personajes de nebuloso pasado.
Por rumbos de la Policía Municipal las cosas tampoco están como para echar las campanas al vuelo ya que el estrenado alcalde dio el primer tropezón al nombrar por recomendación política a los nuevos jefes policiacos que lo acompañaran durante el arranque de su administración.
Lo que de plano tiene molestos a los municipales es la supuesta designación de Jesús Amarilla Méndez como Supervisor General de la corporación, ya que como Subjefe no dio el ancho y difícilmente lo dará en el cargo para el cual el mismo se nombró, pues teme quedarse fuera de la nómina.
El teniente coronel Carlos Huerta Robles, designado como nuevo jefe de la Policía Municipal por obra y gracia del poderoso senador Manlio Fabio Beltrones Rivera, deberá cuidarse de Amarillas Méndez ya que en la primera oportunidad que tenga le va a morder la mano.
Por lo pronto, Amarillas Méndez ya se apropió de la oficina del comandante José Luis Rocha, jefe del Departamento de Tránsito, quien como húngaro anda en busca de un espacio para poder realizar su trabajo.
