jueves, 19 de noviembre de 2009

EL POLICÍA QUE SE REQUIERE

Roberto FLEISCHER-HARO
HERMOSILLO.- No es posible hablar de delincuencia organizada sin apreciar las repercusiones que ésta origina en la seguridad pública que proporciona el Estado a la sociedad.

Sabemos perfectamente que las distintas conductas delictivas que van a desembocar en el delito organizado, narcotráfico, secuestro, trafico de armas, de humanos etc., etc... desestabilizan, trastocan o agreden la seguridad con que se debe contar en un contexto social, y esto más que nada se debe a que existen muchas conductas delictivas que realiza la delincuencia organizada, las cuales involucran de alguna forma a las instituciones públicas encargadas de proporcionar esta seguridad.

Las instituciones del gobierno se han visto superadas por el delito y sobre todo por el organizado, ya que los integrantes de estas instituciones se han involucrado, se han coludido con delincuentes y consecuentemente el delito ha cundido en todas las esferas del gobierno; es difícil pensar que exista una dependencia de la cual no se haya sospechado su relación con el delito organizado.

Es de reconocer la importancia de retomar con la tecnología actual el viejo esquema de la seguridad pública, con elementos con don de mando, vocación de servicio, ética, criterio, iniciativa, disciplinado, institucional, conocedores de la problemática y sobre todo decididos a cumplir con su cometido.

Todo lo anterior integrado con la educación, en el sentido amplio de la palabra, es desarrollar a perfección las facultades y aptitudes del policía, dirigirlo en el aprendizaje, enseñarle; la formación es la acción de constituir un profesional. Un policía convenientemente aleccionado para desempeñarse como tal.

El reto y prioridad es diseñar y ejecutar esquemas dinámicos de prevención son:

Considerando el estado de fuerza con que se cuenta, distribuido en los diversos sectores y zonas policíacas de la ciudad, se puede acondicionar el personal en sus turnos correspondientes por grupos, para implementar en la corporación metas de abatimiento delictivo y evaluación de resultados.

Introducción al Derecho Penal, lo básico que se den por enterado que es delito, cuantas clases de delitos hay, etc. etc.

Adiestrar y capacitar, inculcar principios éticos de servicio, respeto a los derechos ciudadanos y un firme propósito de servir a la sociedad con honestidad y en forma resuelta.

Ciudadanización de los policías, establecer vínculos de los mandos policiales con la comunidad y las organizaciones vecinales para que, en forma oportuna y personal, conozcan y resuelvan las demandas de seguridad.

Que conozcan el Bando de Policía y Gobierno, para que respondan a la demanda ciudadana en prevención con una atención seria, responsable, capaz y humana.

Contacto de los mandos policiales con la ciudadanía, por lo que es importante que se retome el antiguo esquema de barandilla para que sepan resolver problemas cotidianos de vecindad, conciliar intereses entre las partes en conflicto, con base en el Bando de Policía en el Municipio.

Que considere en implementar un Procedimiento Sistemático Operativo P.S.O., con el interés de tener la información, la decisión, el objetivo especifico, la misión, los medios, la coordinación y desarrollo de la operación y de comunicación en el municipio cuando éste se lleve a cabo.

Que realicen en forma entendible y práctica los partes de novedades y tarjetas informativas, que tienen un valor jurídico en sus actuaciones.

Establecer cursos intensivos de relaciones humanas, para mayor atención al ciudadano.

Implementar programas de incentivos.

Conocer y aplicar el manual de los Derechos Humanos para los Policías.

Coordinarse con los elementos de seguridad de los otros niveles de Gobierno.

Con lo anterior se insiste en conformar una Corporación Policíaca ejemplar, capaz de atender y responder oportunamente con eficacia, las demandas sociales; una Corporación con amplio sentido humano, sensible a las necesidades, pero enérgico en el actuar.

Así mismo, se necesita más prudencia en apoyo total a las corporaciones policíacas Municipales del Estado, que no quede en pura retorica, motivado que es la corporación que tiene más contacto con la sociedad.

Para conseguir el objetivo que se requiere, urge se reforme la Ley 255 de Seguridad Pública, Bando de Policía y Gobierno ya que (son obsoletas) donde se les dé más atribuciones a las corporaciones y tengan mayor esfera de acción, los tiempos exigen menos paternalismos y complacencias, la sociedad demanda protección en sus bienes y en su integridad física.

Sonora cuenta y tiene muy pero muy buenos policías que llenan los requerimientos esenciales, no hay necesidad de importarlos.

Roberto Fleischer Haro egresado de la IV generación de la Escuela de Policía. Registro Nacional de Seguridad FEHR440205H26223583 e. Mail rfleischer_44@hotmail.com