
Alfonso CAMPOS-RUBIO
BENJAMIN HILL.- Luego de que el pasado jueves se reportara el hallazgo a un kilómetro de la población de unos restos óseos, consistentes en una columna vertebral, cráneo y ambos fémures, que resultaron ser de la joven señora Mercedes Guadalupe Gámez López, de 20 años, los agentes policiales lograron el arresto de quien fuera su amante, David Rene Aguirre Fimbres (a) “El Ton” (21), como el presunto responsable, se informó.
MERCEDES GUADALUPE GAMEZ LOPEZ
De acuerdo a lo informado, tales restos mortales estaban dentro de terrenos del rancho La Noria y a unos quince metros de las paralelas ferroviarias, los cuales al ser revisados por el Semefo arrojaron que se trataba de fémina, por lo que al revisar los reportes en la corporación municipal, se pudo establecer que podrían tratarse de la mencionada, quien estaba denunciada como desaparecida desde el pasado jueves 28 de enero.
Por lo que al ahondar en las indagatorias de logró ubicar el paradero de “El Ton” Aguirre Fimbres, quien al ser interrogado no aguantó la presión moral y confesó que efectivamente eran amantes, además de revelar que la ahora occisa tenía cuatro meses de embarazo, de cuya paternidad tenía grandes dudas, por cuyo motivo eran constantes las reyertas entre ambos, hasta que posteriormente decidió mejor darle muerte para evitar seguir con la incertidumbre.
Por lo que adquirió una tarjeta para caseta pública, llamándole luego a su celular, con el fin de no dejar rastros, citándola cerca de su vivienda, donde la conminó a que subiera a un Chevrolet “sedan”, café, 1991, en el que enfilaron rumbo al norte por el camino paralelo a las vías del FFCC, hasta llegar a un kilómetro de la población, ya dentro del rancho La Noria.
Inmediatamente después bajaron a platicar y discutir la situación del embarazo, del que tenía grandes dudas sobre su responsabilidad, donde al gritarle la fémina varios insultos, se enfureció y sacó de entre sus ropas un revólver calibre .22, el cual previamente con ese fin se lo había robado de casa de unos familiares, disparándole enseguida en varias ocasiones, para luego desnudarla y rociarla de gasolina, la cual también compró con dicho objetivo, prendiéndole fuego, con el fin de que de esa forma “desapareciera” totalmente de su entorno y borrar evidencias que pudieran incriminarlo.
Días después regresó al sitio para volver a echarle combustible encima y reducir a cenizas los restos óseos que aún quedaban, para luego confesar que el arma utilizada la había envuelto en una bolsa de plástico, la cual arrojó a un pozo cercano, de donde fue recuperada tras lograrse su detención, turnándosele a la AMPFC con sede en Magdalena de Kino y Colosio como presunto responsable de homicidio calificado, añadió el portavoz.