Alfonso CAMPOS-RUBIO
HERMOSILLO.- Alrededor de las 15:50 horas del pasado viernes, a unos 27 kilómetros de Ciudad Obregón y a siete, aproximadamente, de Hornos, municipio de Cajeme, se registró la “emoboscada” contra dos vehículos, donde viajaban, Margarito Montes Parra, de unos 55 años, líder nacional de la UGOCP, y unas veinte personas, de las cuales 15, entre ellas el mencionado, quedaron sin vida, víctimas de las ráfagas de metralleta que les dispararon un grupo de sicarios, al parecer al servicio del narcotráfico.
A pesar del hermetismo por parte de las autoridades encargadas de la seguridad pública, se logró saber que acompañado de campesinos, Montes Parra, secretario general de la Unión General de Obrera, Campesina y Popular, A. C., se trasladaba en dos vehículos, al parecer pick-up, rumbo al rancho “El Alamito” o “El Alamillo”, pero al llegar a unos 600 metros de la entrada del predio “Los Olivos”, los sicarios abrieron fuego contra el convoy, donde se especuló que también viajaba la familia del hoy occiso.
Mientras que otras versiones indicaban que el acaecido líder campesin departía en el rancho “Los Olivos”, cuando de repente arribaron unos veinte sicarios, los cuales empezaron a dispararles con las metralletas “cuerno de chivo”, donde quedaron los quince muertos, mientras que se hablaba de cuando menos tres lesionados, uno de los cuales fue llevado mas tarde al Hospital General del Estado en Ciudad Obregón, donde era custodiado por soldados y policías.
Señalándose que Montes Parra arribó a Ciudad Obregón hace cinco días y el martes acudió a la Presidencia Municipal a invitar al alcalde Manuel Barro Borgaro a un congreso de la Unión General Obrera, Campesina y Popular (UGOCP), organización que dirigió desde su fundación, el cual habría de celebrarse el 11 de noviembre en las instalaciones del Instituto Tecnológico de Sonora Campus Obregón (ITSON).
En una de sus últimas declaraciones a los medios locales, Montes Parra dijo que venía a poner orden en el sector pesquero, denunciando que familias poderosas se apoderaban de la pesca ribereña y de alta mar y precisamente vino a crear un organismo para aglutinar a todos los pescadores desde el Golfo de Santa Clara hasta Agiabampo.
Margarito Montes Parra fundó la UGOCP en la década de los noventa y durante ese tiempo luchó contra gente que tenía en su poder grandes extensiones de tierra en la región de la Cuenca del Papaloapan, tanto del estado de Veracruz como de Oaxaca.
En su lucha por la “recuperación de tierras”, la organización de Montes Parra escenificó violentos enfrentamientos entre campesinos que se disputaban los predios. Incluso hubo varios muertos y gente que resulto mutilada por los machetes utilizados por los grupos en disputa.
El principal centro de operaciones de la UGOCP se ubico en el ejido Colorado, municipio de Tierra Blanca, limítrofe con el estado de Oaxaca, donde Montes Parra asentó su domicilio particular y fundó un rancho con el uso de tecnología de punta y donde incluso se dedicó a la cría de caballos pura sangre.
Con su característico estilo norteño, ya que siempre vestía pantalón de mezclilla, camisa a cuadros, botas de cuero y siempre portaba sombrero de ala ancha, Montes Parra llegó a movilizar más de cinco mil campesinos en su lucha por la tierra. Se autodefinía como el “Emiliano Zapata moderno”.
Su vida siempre estuvo ligada a las controversias.
Se le asoció con actividades del narcotráfico lo que nunca se le comprobó. Sus defensores acusaron al propio gobierno de intentar desacreditar su lucha.
A mediados de los noventa, su hermano Héctor Montes Parra fue ultimado por desconocidos a quienes las autoridades entonces identificaron como miembros una banda criminal organizada.
En junio de 2007, uno de sus hijos, Jorge Montes, fue asesinado también de manera violenta en el palenque instalado en la Feria de San Juan en Cócorit, de la misma municipalidad, además de hacerse público el pleito personal que sostenía con el exgobernador José Eduardo Robinson Bours Castelo, motivo por el que se mantuvo “exiliado” de la entidad durante la administración estatal pasada.
HERMOSILLO.- Alrededor de las 15:50 horas del pasado viernes, a unos 27 kilómetros de Ciudad Obregón y a siete, aproximadamente, de Hornos, municipio de Cajeme, se registró la “emoboscada” contra dos vehículos, donde viajaban, Margarito Montes Parra, de unos 55 años, líder nacional de la UGOCP, y unas veinte personas, de las cuales 15, entre ellas el mencionado, quedaron sin vida, víctimas de las ráfagas de metralleta que les dispararon un grupo de sicarios, al parecer al servicio del narcotráfico.
A pesar del hermetismo por parte de las autoridades encargadas de la seguridad pública, se logró saber que acompañado de campesinos, Montes Parra, secretario general de la Unión General de Obrera, Campesina y Popular, A. C., se trasladaba en dos vehículos, al parecer pick-up, rumbo al rancho “El Alamito” o “El Alamillo”, pero al llegar a unos 600 metros de la entrada del predio “Los Olivos”, los sicarios abrieron fuego contra el convoy, donde se especuló que también viajaba la familia del hoy occiso.
Mientras que otras versiones indicaban que el acaecido líder campesin departía en el rancho “Los Olivos”, cuando de repente arribaron unos veinte sicarios, los cuales empezaron a dispararles con las metralletas “cuerno de chivo”, donde quedaron los quince muertos, mientras que se hablaba de cuando menos tres lesionados, uno de los cuales fue llevado mas tarde al Hospital General del Estado en Ciudad Obregón, donde era custodiado por soldados y policías.
Señalándose que Montes Parra arribó a Ciudad Obregón hace cinco días y el martes acudió a la Presidencia Municipal a invitar al alcalde Manuel Barro Borgaro a un congreso de la Unión General Obrera, Campesina y Popular (UGOCP), organización que dirigió desde su fundación, el cual habría de celebrarse el 11 de noviembre en las instalaciones del Instituto Tecnológico de Sonora Campus Obregón (ITSON).
En una de sus últimas declaraciones a los medios locales, Montes Parra dijo que venía a poner orden en el sector pesquero, denunciando que familias poderosas se apoderaban de la pesca ribereña y de alta mar y precisamente vino a crear un organismo para aglutinar a todos los pescadores desde el Golfo de Santa Clara hasta Agiabampo.
Margarito Montes Parra fundó la UGOCP en la década de los noventa y durante ese tiempo luchó contra gente que tenía en su poder grandes extensiones de tierra en la región de la Cuenca del Papaloapan, tanto del estado de Veracruz como de Oaxaca.
En su lucha por la “recuperación de tierras”, la organización de Montes Parra escenificó violentos enfrentamientos entre campesinos que se disputaban los predios. Incluso hubo varios muertos y gente que resulto mutilada por los machetes utilizados por los grupos en disputa.
El principal centro de operaciones de la UGOCP se ubico en el ejido Colorado, municipio de Tierra Blanca, limítrofe con el estado de Oaxaca, donde Montes Parra asentó su domicilio particular y fundó un rancho con el uso de tecnología de punta y donde incluso se dedicó a la cría de caballos pura sangre.
Con su característico estilo norteño, ya que siempre vestía pantalón de mezclilla, camisa a cuadros, botas de cuero y siempre portaba sombrero de ala ancha, Montes Parra llegó a movilizar más de cinco mil campesinos en su lucha por la tierra. Se autodefinía como el “Emiliano Zapata moderno”.
Su vida siempre estuvo ligada a las controversias.
Se le asoció con actividades del narcotráfico lo que nunca se le comprobó. Sus defensores acusaron al propio gobierno de intentar desacreditar su lucha.
A mediados de los noventa, su hermano Héctor Montes Parra fue ultimado por desconocidos a quienes las autoridades entonces identificaron como miembros una banda criminal organizada.
En junio de 2007, uno de sus hijos, Jorge Montes, fue asesinado también de manera violenta en el palenque instalado en la Feria de San Juan en Cócorit, de la misma municipalidad, además de hacerse público el pleito personal que sostenía con el exgobernador José Eduardo Robinson Bours Castelo, motivo por el que se mantuvo “exiliado” de la entidad durante la administración estatal pasada.